Hace unos años, decidí renovar mi cocina sin hacer una inversión enorme. Mi encimera de granito, aunque duradera y estilosa, ya mostraba signos de desgaste. Me pregunté si podía cambiar su apariencia sin reemplazarla por completo. La respuesta es sí, y te contaré cómo lo hice y cómo tú también puedes hacerlo.
Primero, investigué sobre los costos. Reemplazar una encimera de granito puede costar entre 1.500 y 3.000 euros, dependiendo de la calidad del granito y la dificultad del trabajo. Sin embargo, cambiar su acabado es mucho más económico, oscilando entre 300 y 600 euros.
Comencé limpiando la superficie a fondo. Usé un limpiador diseñado específicamente para granito, eliminando toda la suciedad y residuos. Este paso es crucial porque cualquier partícula puede afectar el resultado final. El tiempo invertido en esto fue aproximadamente de dos horas, pero vale la pena cada minuto.
Después de la limpieza, lijé la superficie con una lijadora de mano. Utilicé diferentes grados de lija, comenzando con una de grano 100 y terminando con una de grano 400 para asegurarme de que la superficie quedara completamente lisa. Este proceso tomó alrededor de cuatro horas y resultó en una superficie increíblemente lisa al tacto.
Hay varios acabados que puedes elegir. Yo opté por un acabado pulido porque quería una apariencia brillante y reflejante. Sin embargo, también está el acabado mate, que es más sutil y menos reflejante. El acabado se aplica utilizando pulidoras de alta velocidad, y requiere paciencia. Tardé unas tres horas en completar este paso, alternando entre diferentes productos de pulido.
Luego, apliqué un sellador de alta calidad. Este sellador protege la superficie del granito contra manchas y daños. Es importante aplicar al menos dos capas y dejar secar cada capa según las instrucciones del fabricante, en mi caso, unas dos horas por capa. Elegí un sellador que prometía una protección duradera, y hasta ahora, ha cumplido con su promesa.
Un amigo, que trabaja en una empresa especializada en encimeras, me recomendó realizar un mantenimiento frecuente con productos específicos para granito, evitando productos ácidos que puedan dañar el sellador. Siguiendo su consejo, gasto unos 20 euros al mes en productos de limpieza y mantenimiento.
Al hablar con un profesional del sector, me comentó que las técnicas modernas permiten cambiar el acabado de cualquier encimera de granito, independientemente de su antigüedad. Aseguró que incluso las encimeras de más de 20 años pueden parecer nuevas con el proceso adecuado.
El resultado fue fantástico. Mi encimera de granito parecía nueva, con un acabado pulido que reflejaba la luz de la cocina, dando una sensación de amplitud y limpieza. Me ahorré al menos 1.200 euros y el tiempo de instalación que hubiera implicado reemplazar toda la encimera. Sin duda, fue una de las mejores decisiones que tomé durante la renovación de mi cocina.
Para quienes consideren esta opción, recomiendo investigar bien y, si es posible, consultar a un profesional para obtener los mejores resultados. No solo es una solución económica, sino también eficiente y relativamente rápida si se compara con el tiempo necesario para retirar y reemplazar una encimera completa.
Ya sea que busques una apariencia moderna o desees mantener la clásica elegancia del granito, cambiar su acabado puede ser la solución perfecta. Yo lo hice y no puedo estar más satisfecho con los resultados. Si te animas a hacerlo, te aconsejo empezar cuanto antes y disfrutar de una cocina renovada sin necesidad de gastar una fortuna.
Para más información sobre cómo encimera granito podrían mejorar tu hogar, no dudes en investigar y considerar todas las opciones disponibles.